Aquí estamos otra vez: adentrándonos en la entrañable temporada de gripe y resfriados. Aunque tal vez no pueda evitar a otras personas y a niños que estornudan y tosen, ¡no tiene por qué pasarle a usted! Puede tomar muchas medidas para apoyar y estimular el sistema inmunitario del cuerpo para mantenerse fuerte y sano. 

En primer lugar, es importante saber cuál es la causa de que sea más susceptible a enfermarse. El estrés crónico, sea cual sea la causa, afecta a las hormonas y al sistema digestivo, desequilibrándolos, lo que puede elevar la presión arterial y tensar el sistema circulatorio —lo cual debilita el sistema inmunitario. Las comidas azucaradas y el alcohol pueden provocar deficiencias inmunitarias. Además, aunque no puede resfriarse por tener frío, su cuerpo tiene que esforzarse más para mantenerse caliente, lo cual también puede afectar a su sistema inmunitario. 

Esa es la mala noticia —pero hay muchas buenas. Hoy sabemos más que nunca acerca de cómo mantener nuestros cuerpos en excelente forma para luchar contra las enfermedades utilizando alimentos, suplementos naturales e incluso esencias como medicina. He aquí cómo cuidarse: 

Alimentos que regeneran el sistema inmunológico

Evitar las comidas que causan inflamación y centrarse en aquellas que la reducen ayudará a su cuerpo a estar listo para detener cualquier resfriado o gripe que se cruce en su camino. La antigua, pero eficaz,  sopa casera de pollo con ajo y jengibre sigue siendo una de mis favoritas. Como es una época del año muy ajetreada, tal vez no tenga tiempo de hacer sopa partiendo de cero. Afortunadamente, puede adquirir antiinflamatorios así como jengibre y ajo en forma de suplementos para fortalecer su sistema inmunológico. El jengibre estimula el sistema inmunitario, al ser un bactericida natural, y alivia el malestar estomacal. El ajo contiene propiedades antibacterianas y antivirales. Recomiendo buscar las cápsulas recubiertas, que ayudan a que el suplemento se disuelva en el intestino en lugar de en el estómago —de ese modo no afectarán a las bacterias sanas de los intestinos. 

Complementos naturales para mejorar la función inmunitaria

Uno de mis complementos favoritos para un sistema inmunitario fuerte es la raíz de astrágalo. Trabaja para fortalecer el sistema inmunitario y ayuda a las células a mantenerse más jóvenes y fuertes durante más tiempo. Se ha investigado mucho la raíz de astrágalo y sus efectos en los telómeros, el marcador de nuestro ADN que puede predecir el envejecimiento. Por ejemplo, unos telómeros cortos indican un envejecimiento rápido, mientras que los telómeros más largos se consideran más óptimos. Tome una gota al día o hasta tres cuando se sienta enfermo. Un cuentagotas normalmente contiene 500 miligramos de raíz de astrágalo.

Una taza de parece ir perfectamente con el tiempo más frío. Me encanta hacer té con cúrcuma –tiene estupendas propiedades antiinflamatorias y ayuda a equilibrar las hormonas. Pruebe este té procedente de mi último libro: Super Woman Rx. Añada dos cucharaditas de cúrcuma molida a una taza de agua hirviendo. Añada una bolsita de té negro o verde (se sabe que ambos ayudan al cuerpo a luchar contra los virus) y una cucharadita de miel (otro de los ingredientes naturales que benefician al sistema inmunitario) y déjelo en infusión durante cinco minutos. Una poderosa infusión para su bienestar. 

Los probióticos son importantes a la hora de reequilibrar el microbioma (su intestino), que a menudo se considera el centro de mando del sistema inmunitario. Los alimentos ricos en probióticos incluyen el yogur, el caldo de huesos y la kombucha (una bebida fermentada que se piensa que surgió en Rusia), pero los probióticos también se toman como complementos. Sugiero un probiótico que tenga cinco o seis cepas bacterianas y al menos 20 millardos de unidades formadoras de colonias (UFC). 

Esencias reparadoras para prevenir enfermedades

Las esencias influyen en la parte del sistema límbico del cerebro, que aumenta la relajación y disminuye el estrés—dos maneras excelentes de ayudar al cuerpo a estimular el sistema inmunitario. El olíbano descongestiona, la menta da energía y la lavanda relaja y tranquiliza. Los difusores para aceites esenciales no cuestan mucho, hacen que la casa huela estupendamente y están libres de toxinas y productos químicos.