Con la rápida propagación del nuevo coronavirus (COVID-19), un virus respiratorio para el que aún no tenemos tratamiento ni vacuna, los esfuerzos de salud pública se han concentrado en dos mensajes clave: distanciamiento social (debido a que las partículas del virus viajan por el aire) y el lavado de manos (debido a la capacidad de las partículas del virus de mantenerse vivas durante horas o días en las superficies).

Por qué es importante lavarse las manos

Lavarse las manos es una forma sencilla, pero increíblemente efectiva de combatir la propagación de este virus.  Una forma importante de propagación del virus es a través de gotitas (provenientes de un estornudo, tos o incluso simplemente al hablar) que pueden ser inhaladas si se está muy cerca de alguien o que pueden caer en una superficie cercana. Después otra persona pasa por allí y toca esa superficie, y luego sin darse cuenta se toca la cara, se frota los ojos, se muerde las uñas o realiza cualquier otro comportamiento potencialmente dañino, y ahora acaba teniendo partículas del virus en su cuerpo.

¿Cómo funciona exactamente el lavado de manos para combatir la propagación? Intentaremos que no tenga una explicación demasiado científica, pero en resumen, el jabón de manos tiene la capacidad de descomponer los lípidos, y el propio virus tiene una membrana lipídica que lo protege (imagínese que el virus está protegido por una capa grasa); el jabón destruye esa capa, y luego enjuagamos las partículas de virus que mueren desprotegidas en el fregadero. Los expertos recomiendan lavarse las manos durante 20 segundos (el tiempo que se tarda en cantar el feliz cumpleaños dos veces), y luego enjuagar y secar las manos por completo.

Dermatitis en las manos relacionada con el exceso de lavado

Sin embargo, todo este lavado de manos ha empezado a tener un efecto secundario que los dermatólogos esperaban: dermatitis en las manos (llamada con frecuencia eczema de manos). Esto se debe a que el jabón no sólo destruye los lípidos o la grasa de las membranas virales, sino que también elimina los aceites de nuestra propia piel que ayudan a formar la barrera de la piel. El uso continuo de jabones para manos puede llevar a la ruptura de dicha barrera, lo que a la larga provocará que la piel se reseque y se escame, con la posibilidad de que se produzcan grietas y fisuras dolorosas. Para algunos pacientes más sensibles, también puede provocar un brote con picazón con la misma piel seca y resquebrajada o parches de piel escamosa de color rojo o marrón oscuro. La dermatitis en las manos no solo es incómoda, sino que también nos pone en riesgo de infección bacteriana porque la barrera se ve afectada.

Los expertos dicen que el desinfectante de manos no es tan efectivo como lavarse las manos cuando se trata de matar virus, pero sin duda es mejor que nada cuando no se dispone de jabón y un lavabo. ¿Los desinfectantes de manos son mejores para la piel o para prevenir la dermatitis de las manos? La mayoría de las veces, la respuesta es un no rotundo. Para que un desinfectante de manos sea efectivo para matar gérmenes, necesita contener al menos un 60% de alcohol (normalmente alcohol etílico). Este alcohol presente en los desinfectantes tiene el mismo efecto de eliminación de aceite de las manos. También suelen tener otros disolventes además del alcohol que son aún más agresivos para las manos. Por lo tanto, limítese a lavarse las manos cuando sea posible. 

Cómo cuidar mejor de las manos

Entonces, ¿qué debemos hacer? Por suerte, tenemos muchas opciones cuando se trata de mantener las manos limpias y cuidar nuestra piel. Los siguientes son algunos consejos para el cuidado de las manos:

  • Usar agua fría o tibia, no caliente, al lavarse las manos. 
    Aunque los datos sugieren que el virus puede eliminarse con temperaturas más altas, el agua caliente no se necesita para cumplir esta función y, de hecho, solo provoca una mayor eliminación de la grasa de la piel. El jabón y el agua por sí solos se encargarán de ello, así que use agua fría o tibia.
  • Elija un jabón suave y no perfumado para lavarse las manos. 
    Si bien es cierto que queremos ver la etiqueta "antibacterial/antiviral" en los productos de limpieza y en las toallitas desinfectantes, en realidad no necesitamos que el jabón de manos la tenga. Según la FDA, no existe ningún beneficio adicional al usar jabón antibacterial, y existe la posibilidad de que los productos químicos añadidos puedan provocar más irritación. Las fragancias son otro ingrediente que hay que evitar, ya que suelen contener muchas sustancias químicas que pueden agravar la piel sensible. Una formulación cremosa será más hidratante y aún así conseguirá cumplir su función.
  • Evite los secadores de manos. 
    Hay dos motivos para esto. Por una parte (y la más importante cuando se trata de reducir la transmisión del virus), puede propagar partículas virales. Desde el punto de vista del cuidado de las manos, el aire seco y caliente puede resecarlas aún más y provocar un empeoramiento del eccema de las manos. En lugar de eso, séquese las manos con una toalla de papel (frotarlas puede irritarlas más). Use enseguida un humectante para manos.
  • Hidrátese después de lavarse las manos. 
    No podemos evitar que el jabón nos quite los aceites de las manos, pero podemos añadir esos aceites y la humedad después de lavarlas.
    Elija cremas de manos que sean espesas, pero de rápida absorción para que pueda continuar con su día. Es importante que si ya tiene las manos secas, busque una fórmula cremosa en lugar de una loción. Las cremas contienen más aceites (que es lo que intentamos sustituir, después de todo), mientras que las lociones contienen más agua. Mientras que las lociones son adecuadas para una piel sana, en una piel que ya está seca, es posible que las lociones provoquen un mayor grado de resequedad cuando se evapora el agua que contienen. 
    Los aceites y las mantecas actúan como oclusivos (al igual que otros ingredientes como la vaselina) que sellan la humedad en lugar de permitir que se evapore. En casa, mantenga un frasco de crema de manos en el lavabo donde se lava las manos, ¡y lleve una crema hidratante de bolsillo cuando salga (lo cual debería ser limitado ahora, pero muchos de nosotros tenemos trabajos que aún exigen que nos presentemos)! Si usa una crema hidratante de bolsillo, no olvide limpiar periódicamente el tubo con una toallita desinfectante (al igual que nuestros teléfonos celulares y otras cosas que tocamos con frecuencia)!
  • Consienta sus manos por la noche. 
    Si ya sufre de manos resecas y resquebrajadas, aproveche la hora de acostarse para darles un poco de cariño. Después de lavarlas y secarlas con palmaditas, aplique una crema humectante espesa (ya sea una formulación cremosa o incluso una pomada, que es la que tiene el mayor contenido de aceite). Luego cúbralas con guantes de algodón y duerma con ellos puestos. Use el mismo par todas las noches. ¡Sus manos se lo agradecerán después de unos días!!
  • Considere la posibilidad de usar un humidificador para el hogar. 
    Un humidificador para el hogar añadirá más humedad al aire y evitará que se evapore la humedad de la piel. También puede ayudar con la congestión y la resequedad de la nariz.
  • Protéjase las manos cuando pueda. 
    Si puede, use guantes al lavar los platos o al limpiar la casa. También en el caso de que prepare alimentos, como cortar cítricos. Esto evitará una mayor irritación causada por otros agentes de limpieza o ácidos que pueden empeorar la dermatitis en las manos.
  • Trate las manos inflamadas con hidrocortisona. 
    Si ha desarrollado comezón y ardor con la piel seca, es hora de aplicar una crema de hidrocortisona de venta libre a la mezcla. Después de lavarse, aplique esta crema, y luego su crema humectante más espesa. Por la noche, aplique la hidrocortisona después de lavarse, y luego una pomada espesa y póngase los guantes de algodón.

Si pone en práctica todos estos consejos y sigue sufriendo de piel seca y resquebrajada, llame a su médico de cabecera o a su dermatólogo. Aunque estas estrategias ayudarán a la mayoría de las personas que sufren de dermatitis en las manos, hay algunas que pueden padecer otras afecciones como la dermatitis de contacto o la psoriasis y necesitan cremas de concentración más alta para tratar el problema y calmar la inflamación. ¡No espere hasta que sea muy grave para pedir ayuda!!