¿Qué es el espino?

El espino, miembro de la familia de las rosas, es un árbol o arbusto espinoso y florido que produce racimos pequeños de flores rojas, blancas o rosadas. Existe una amplia variedad de especies de plantas de espino; la más común tiene el nombre científico de Crataegus rhipidophylla.

Ahora bien, si no anda buscando un nuevo arbusto para su jardín o algunas flores para un ramo, quizá se pregunte por qué verá espino por todas partes en 2022.

Quizá le sorprenda saber que las hojas, las flores, las bayas, los tallos e incluso la corteza de la planta se utilizan a menudo en la medicina herbaria por sus efectos positivos sobre la salud cardíaca, la digestión y mucho más. Esta antigua hierba medicinal está disponible en diversas formas como suplemento nutricional. Los usos saludables y prácticos del espino son numerosos.

Salud cardíaca

El espino es la planta medicinal más antigua conocida en la medicina europea. Dioscórides, un antiguo médico griego al que se suele llamar "el padre de la farmacología", describió en el siglo I las acciones del espino sobre el corazón.

Según la medicina tradicional china (MTC), la baya del espino es un tónico para el corazón, y las últimas investigaciones demuestran sus características de protección cardiovascular.1

Los fitonutrientes de las bayas de espino pueden tener un efecto antioxidante que ayuda a proteger el organismo, incluido el corazón. Pueden fortalecer las paredes de los vasos sanguíneos, aumentar el flujo sanguíneo y aumentar la tolerancia al ejercicio.2

El centro oncológico Memorial Sloan Kettering señala que los científicos creen que el espino provoca la dilatación del revestimiento del músculo liso de las arterias coronarias del corazón. Esta acción favorece al corazón al aumentar el flujo sanguíneo hacia él.

El espino también podría aumentar el ritmo cardíaco, la transmisión nerviosa, la contracción del músculo cardíaco y la irritabilidad del músculo cardíaco. 

Hipertensión arterial

Los estudios indican que el espino podría ayudar a reducir la hipertensión arterial.

En un estudio publicado en 2002 se investigó el uso potencial del extracto de espino y los suplementos de magnesio, tanto por separado como en combinación, para reducir la presión arterial.6

Al cabo de diez semanas, 19 personas (de 38 voluntarios del estudio) que tomaron espino presentaron una mayor reducción de la presión diastólica en reposo (la cifra inferior del índice de presión arterial) en comparación con los demás participantes del estudio.

En otro estudio se analizó el efecto del espino sobre la hipertensión arterial en personas con diabetes de tipo 2 que tomaban medicamentos recetados.7 Los investigadores dividieron a un grupo de 79 pacientes diabéticos en dos grupos: uno que tomó extracto de espino a diario durante 16 semanas y otro que tomó un placebo

Los participantes del estudio que tomaron espino presentaron lecturas de presión arterial diastólica mucho menores que los del grupo del placebo.

Otras afecciones relacionadas con el corazón

Las investigaciones han revelado que el extracto de espino podría mejorar los niveles de colesterol en sangre por su contenido en flavonoides y pectina. (La pectina es un tipo de fibra que interviene en el metabolismo del colesterol).

Cuando los niveles de colesterol se desequilibran, sobre todo en el caso de los triglicéridos altos y el colesterol HDL (bueno) bajo, se puede desarrollar aterosclerosis, que es una acumulación de placas en los vasos sanguíneos que puede provocar el endurecimiento y el estrechamiento de las arterias. 

Según estudios preliminares en animales, el espino podría ayudar a reducir los niveles de grasa en la sangre, lo que incluye el colesterol, y contribuir a la prevención de la aterosclerosis. 

  • En un estudio realizado durante seis semanas, se comprobó que las ratas alimentadas con suplementos de bayas de espino presentaban niveles considerablemente reducidos de triglicéridos en ayunas y de colesterol LDL (malo).8
  • En otro estudio que duró seis meses y en el que participaron 64 personas con aterosclerosis, se comprobó que la ingesta diaria de una combinación de extracto de espino y un extracto de hierbas chinas reducía el espesor de la placa dañina acumulada en la arteria carótida.9

Es necesario realizar más investigaciones para confirmar los beneficios en humanos.

Ansiedad

Los practicantes de la medicina tradicional han recurrido al espino para tratar ciertas afecciones psicológicas, como el estrés, la ansiedad y la depresión. 

Los investigadores que estudiaban el efecto del espino y el magnesio sobre la presión arterial descubrieron que quienes tomaban espino experimentaban una mayor reducción de la ansiedad que otros grupos de prueba.6 

Por otra parte, en un estudio realizado en 2004 participaron 264 personas que sufrían ansiedad y a las que se les administró una formación de extracto de espino, magnesio y flor de amapola de California.10 Los participantes de este estudio que sufrían de ansiedad leve a moderada mostraron un descenso considerable de los niveles de ansiedad en comparación con el placebo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que en este estudio no se investigó específicamente el papel desempeñado por el espino por sí solo.

Digestión

Según un análisis crítico publicado en Nutrients en 2015, el espino (sus bayas, hojas y flores) es beneficioso para el tratamiento de enfermedades gastrointestinales y otros problemas digestivos.11 

La fibra contenida en las bayas de espino actúa como un prebiótico. Por lo tanto, promueve un sistema digestivo saludable porque los prebióticos sirven básicamente de alimento para los probióticos. Los probióticos considerados las "bacterias buenas" del intestino, ayudan a mantener un equilibrio saludable de microorganismos en el tracto digestivo. 

Además, los estudios en animales indican que las bayas de espino pueden aumentar la actividad de las enzimas necesarias para digerir los alimentos grasos y ricos en proteínas.12 Otras investigaciones en animales revelan que el extracto de espino puede acelerar el tiempo de tránsito de los alimentos en el sistema digestivo.13

Propiedades antiinflamatorias

Las investigaciones realizadas en ratones con enfermedades hepáticas demostraron que el extracto de bayas de espino inhibe considerablemente la liberación de compuestos inflamatorios, lo que disminuye la inflamación y las lesiones hepática.14

En otro estudio, se examinó el efecto de la vitexina en ratones con afecciones respiratorias.15 La vitexina es un compuesto que está presente en las hojas de espino. Los investigadores descubrieron que los ratones que recibieron vitexina tenían menos glóbulos blancos que respondían a la inflamación y producían menos proteínas que la desencadenan. 

Estos resultados de los estudios en animales y en otros laboratorios indican que es posible que los beneficios antiinflamatorios de los suplementos de espino también existan para los seres humanos.

Combate los radicales libres

El organismo produce radicales libres para responder a elementos nocivos del entorno, como el humo del tabaco, la contaminación atmosférica o los rayos ultravioleta Sin embargo, los radicales libres también se crean como un subproducto de los procesos normales que se producen en las células.

Un análisis de la literatura científica publicado en 2015 Nutrients señaló que las bayas de espino contienen cantidades considerables de polifenoles.16 Estos compuestos antioxidantes ayudan a neutralizar los radicales libres. Los investigadores relacionan con frecuencia la acción de los radicales libres en el organismo con el proceso de envejecimiento, así como con el desarrollo de cáncer y enfermedades crónicas.

Usos culinarios

El espino se puede consumir crudo o cocido. En Europa y Norteamérica se suele consumir en mermeladas o jaleas. El espino tiene un sabor fuerte que se puede conservar bien.

En las culturas asiáticas, el espino es un ingrediente habitual en caramelos y bebidas. Su sabor dulce y ácido lo hace ideal para estos usos.

Nutrición

El espino contiene cantidades considerables de vitaminas B (incluido el ácido fólico) junto con rutina, catequinas, saponinas, vitexina y diversas antocianidinas que pueden ejercer un efecto antioxidante en el organismo.

Entre su mezcla excepcional de vitaminas, minerales y compuestos orgánicos, la baya de espino contiene: 

Dosis y preparación

El extracto de espino se puede adquirir en preparados comerciales, como comprimidos, cápsulas y tinturas. En Estados Unidos hay otros productos de espino disponibles, como las hojas, las flores y las bayas.

Las dosis estudiadas oscilan entre 160 y 1800 miligramos al día, repartidos en dos o tres dosis con una duración de 3 a 24 semanas. Aunque las investigaciones aún no han determinado la dosis más eficaz, las dosis elevadas parecen tener una mayor eficacia terapéutica.

Dado que el espino tarda algún tiempo en ejercer sus efectos, es posible que necesite una prueba de al menos cuatro a ocho semanas antes de determinar su eficacia.

Posibles efectos secundarios

En general, se considera que el espino es inocuo y es bien tolerado por la mayoría de las personas que toman una dosis recomendada durante un máximo de 16 semanas. Los efectos adversos más comunes son:

  • Vértigo y mareos
  • Náuseas y otros síntomas intestinales
  • Fatiga
  • Sudoración
  • Dolor de cabeza
  • Palpitaciones
  • Hemorragias nasales
  • Agitación
  • Cambios de humor
  • Dificultad para respirar
  • Reacciones alérgicas graves

Y en dosis elevadas, el espino puede provocar sedación y una disminución de la presión arterial.

No tome espino si sabe que es hipersensible a los productos de Crataegus.

No se recomienda su uso durante el embarazo porque podría estimular las contracciones uterinas. Ya que el espino no se ha estudiado adecuadamente durante la lactancia o entre los jóvenes, no se recomienda para los niños o las madres lactantes.

Aunque se ha demostrado que el espino posee efectos cardiotónicos, es importante que hable con su médico antes de probarlo con este fin, sobre todo si padece alguna enfermedad cardíaca.

Los suplementos de espino pueden interactuar con medicamentos como los betabloqueantes, los bloqueantes de los canales de calcio u otros fármacos para tratar el corazón, el colesterol y la presión arterial. Como el espino puede reducir la presión arterial, esta podría bajar demasiado si combina el espino con sus medicamentos para la presión arterial. Las personas que toman anticoagulantes deben tener cuidado, ya que el espino puede aumentar el riesgo de sufrir hemorragias.

Referencias:

  1. Wu, M., Liu, L., Xing, Y., Yang, S., Li, H., & Cao, Y. (2020). Roles and Mechanisms of Hawthorn and Its Extracts on Atherosclerosis: A Review. Frontiers in pharmacology, 11, 118.
  2. Orhan IE. Phytochemical and Pharmacological Activity Profile of Crataegus oxyacantha L. (Hawthorn) - A Cardiotonic Herb. Curr Med Chem. 2018;25(37):4854-4865.
  3. Pittler MH, Guo R, Ernst E. Hawthorn extract for treating chronic heart failure. Cochrane Database Syst Rev. 2008;(1):CD005312
  4. Pittler MH, Schmidt K, Ernst E. Hawthorn extract for treating chronic heart failure: meta-analysis of randomized trials. Am J Med. 2003;114(8):665–674.
  5. Zick SM, Vautaw BM, Gillespie B, Aaronson KD. Hawthorn Extract Randomized Blinded Chronic Heart Failure (HERB CHF) trial. Eur J Heart Fail. 2009;11(10):990-9.
  6. Walker AF, Marakis G, Morris AP, Robinson PA. Promising hypotensive effect of hawthorn extract: a randomized double-blind pilot study of mild, essential hypertension. Phytother Res. 2002;16(1):48-54.
  7. Walker AF, Marakis G, Simpson E, et al. Hypotensive effects of hawthorn for patients with diabetes taking prescription drugs: a randomised controlled trial. Br J Gen Pract. 2006;56(527):437-43.
  8. Diane A, Borthwick F, Wu S, Lee J, Brown PN, Dickinson TA, Croft KD, Vine DF, Proctor SD. Hypolipidemic and cardioprotective benefits of a novel fireberry hawthorn fruit extract in the JCR:LA-cp rodent model of dyslipidemia and cardiac dysfunction. Food Funct. 14 de septiembre de 2016;7(9):3943-52.
  9. Liu LT, Zheng GJ, Zhang WG, Guo G, Wu M. [Clinical study on treatment of carotid atherosclerosis with extraction of polygoni cuspidati rhizoma et radix and crataegi fructus: a randomized controlled trial]. Zhongguo Zhong Yao Za Zhi. Marzo de 2014;39(6):1115-9.
  10. Hanus M, Lafon J, Mathieu M. Double-blind, randomised, placebo-controlled study to evaluate the efficacy and safety of a fixed combination containing two plant extracts (Crataegus oxyacantha and Eschscholtzia californica) and magnesium in mild-to-moderate anxiety disorders. Curr Med Res Opin. Enero de 2004;20(1):63-71.
  11. Nabavi SF, Habtemariam S, Ahmed T, Sureda A, Daglia M, Sobarzo-Sánchez E, Nabavi SM. Polyphenolic Composition of Crataegus monogyna Jacq.: From Chemistry to Medical Applications. Nutrients. 2015; 7(9):7708-7728.
  12. Editorial Committee of Pharmacology of Chinese Materia Medica. Pharmacology of Chinese Materia Medica. 2000 ed. People’s Medical Publishing House; Beijing, China: 2000.
  13. Wang X, Zhang C, Peng Y, Zhang H, Wang Z, Gao Y, Liu Y, Zhang H. Chemical constituents, antioxidant and gastrointestinal transit accelerating activities of dried fruit of Crataegus dahurica. Food Chem. 25 de abril de 2018;246:41-47.
  14. Han X, Li W, Huang D, Yang X. Polyphenols from hawthorn peels and fleshes differently mitigate dyslipidemia, inflammation and oxidative stress in association with modulation of liver injury in high fructose diet-fed mice. Chem Biol Interact. 25 de septiembre de 2016;257:132-40.
  15. Timalsina D, Pokhrel KP, Bhusal D. Pharmacologic Activities of Plant-Derived Natural Products on Respiratory Diseases and Inflammations. Biomed Res Int. 2021;2021:1636816. 
  16. Nabavi SF, Habtemariam S, Ahmed T, et al. Polyphenolic Composition of Crataegus monogyna Jacq.: From Chemistry to Medical Applications. Nutrients. 2015;7(9):7708-7728.